La conciencia ambiental también ha llegado a los salones de belleza, donde los estilistas están adoptando productos ecológicos y prácticas sostenibles. Desde tintes veganos hasta técnicas que reducen el consumo de agua y energía, estos cambios buscan minimizar el impacto ambiental sin sacrificar la calidad del servicio. Cada vez más clientes valoran la responsabilidad ecológica, haciendo que esta tendencia sea una prioridad en el sector.